miércoles, 9 de abril de 2008

Barcelona del Tercer Mundo - Tres Pruebas

Claro, uno llega a Barcelona y se encuentra con estas calles en espiral, la sobre abundancia de motos y autos último modelo, puertas a lo star-trek por todos lados, mucha arquitectura, computadoras increíbles y entonces piensa:

- ¡Venga hombre!, ¡Pues que he llegado al primer mundo!



Pues, lamento decirles que ¡No!, que el progreso ha sido en vano, y de ahora en adelante cada vez que vean la miseria de un país del Tercer Mundo y ustedes, Fundamentalistas del Aire Acondicionado, digan: "Y bueno, es el precio que hay que pagar para que la gente del Primer mundo tenga SCOOTERS", bueno, sepan que el Primer Mundo, ¡no es tal!

He aquí las tres pruebas de porque Barcelona también es del Tercer Mundo:

PRUEBA NÚMERO UNO


¡ Diskettes ! Claro, yo llegue pensando que acá usaban DVD, BLU-RAY, tomando cada cuchara con desconfianza a ver si era un PEN DRIVE de 30 gigas, cuando de repente, ¡Zas!, abro una cajita y mirá... 16 diskettes para instalar el Office XP... o sea... ¡DISKETTES!... ¡DISKETTES!

Bueno, ya.




¡DISKETTES!

PRUEBA NÚMERO DOS


La secuencia es así: Salgo del Hotel Bertran, ingreso a un Taxi con GPS, circulamos por calles llenas de Mercedes Benz, pasamos por Iglesias con torres tan altas que parecieran tocar el cielo, ingresamos al edificio de las oficinas y cuando entramos al ascensor... ¡mira coño lo que me he encontrado!...

¿Qué pasa? ¿Está muy chico en la foto? ¡Miralo ampliado!


¡ El globo de Huracán pintado con marcador indeleble en el ascensor ! Sí, así es, la pasión Quemera cruza el atlántico dispuesta a vandalizar los ascensores del Primer Mundo.

(La foto la sacó Román en Febrero, por eso la fecha)

PRUEBA NÚMERO TRES



¡Así es!, para tomar agua no tienen el famoso "Dispenser de agua" multi-uso que te llena el vaso, el termo, y te limpia la camisa. O sea, ¿te acordás cuando cual purrete ibas a la heladería a pedirte uno de Frutilla (porque de pibes todos comiamos frutilla) y luego de degustar el helado te acercabas en puntas de pie a saciar tu sed con el bebedero?

Pues el pasado ha vuelto. Acá no hay ninguna tecnología ni nada. Si querés tomar agua, inclina el cuello, apreta el botoncito, y cual perrito a tomar agua.


(¡Perrito!)

Espero que estas pequeñas pruebas nos hagan entender que plata más, plata menos, todos los países son exactamente lo mismo.

Excepto por esos bastardos de Sry Lanka.

Esos sí que son de otro mundo.

En fin, los saluda... Desde la península,

Demax.-

PD: ¿Te quedaste con ganas de más?, ¡Marchan dos bonus!

BONUS 1

El subte parece el de la Línea C (exceptuando el ruido).



BONUS 2

¡El bidet es raro!

lunes, 7 de abril de 2008

El viaje en avión

Alguien alguna vez escribió:

- Las nubes son como pedazos de algodón.

Dicha frase logro perdurar en el inconciente colectivo lo suficiente como para convertirse en cliche, junto a otras celebres como "No sos vos, soy yo" y "Blancas palomitas". Pero claro, ¿que sucede?, hay una razón por la cual los cliches y los esteorotipos existen. Es porque algo, en algun lado, en algún lugar, si se parece el esteorotipo, si responde al cliche.

En este caso, las nubes:



Yo diría que son como tergopol, pero, ¡venga hombre!, esas ganas de morderlas, de mojarlas en salcita y mandarlas para adentro. Definitivamente, pedazos de algodón.

En cuanto al viaje en avión en sí, he de decir que fue bastante agradable, tuve la oportunidad de ver los 300 en una pequeña pantallita que había en la parte trasera del asiento de adelante:



Vi la escena más famosa tanto en inglés, como en español "gallego". Noté las siguientes diferencias:

INGLÉS:
- THIS.. IS...SPARTAAAAAAAAAAAAAAA

ESPAÑOL:
- ESTO... ES.. ESPARTAAAAAAAAAAA

El único momento de turbulencias del avión sucedió mientras dormía y la secuencia basicamente fue así:
- Estoy durmiendo
- Algo me despierta mientras duermo
- Abro un ojo: el cartel de "Ponerse los cinturones de seguridad" está prendido
- Miro al Asistente de vuelo: Se agarra de los pasillos para no caerse.
- Pienso: Bueno, supongo que si el asistente de vuelo no se cayó al piso, no debe ser tan grave...
- Cierro los ojos mientras pienso: "Si caemos a una isla, solo espero que también caiga Claire"


¿Alguien se acuerda del Sim City? ¿Vieron cuando iban creando las casas, los negocios y los diferentes "distritos" como se veía? Bueno, me imaginó que el creador se debe haber inspirado en algo como lo siguiente:


Como curiosidad, detrás mio hacia mi izquierda viajó una mina que durante el despegue y el aterrizaje cerró los ojos, tomó la mano de su marido y rezó. Por las dudas, para mi próximo viaje quiero una fanática religiosa con miedo, porque no se si fueron sus rezos o qué, pero el aterrizaje fue re tranquilo. Es más, una vez asegurado el aterrizaje, una vieja, un par de asientos más allá, se puso a aplaudir al grito de "Bravo, bravo". El único que la secundó, fui yo.

Me gusta pensar que el piloto nos oyó.

Una pequeña escala en el Aeropuerto de Barajas, una primer oleada de "Vale"s y "Venga"s y un olvidable partido de Winning Eleven después... nos subimos a un avión un poco más chiquito, cuya turbina no era para nada chiquita:


Al lado nuestro se sentó una mina que debería de viajar tanto en avión, como yo en colectivo. Mientras yo miraba por la ventanilla, señalando cada luz que se veía en la noche, ella se entretenía en hojear una revista que, creanme, sería la envidia de cualquier Gente, Caras o Paparrazzi.

Ah, y si creían que las propogandas de Yogur, Celulares, Actimel, Bebidas y demás no eran suficiente... Miren a quien me encontré en el avión:



En fin, cuarenta minutos de viaje, un aterrizaje bastante tranquilo (esta vez sin aplausos), y un desambarco y finalmente llegamos a ese lugar tan esperado:



De aquí en adelante, comienza el Blog... Desde la Península.

Saludos,

Demax.-

Pd: Maldito Leandro y sus ideas!, jajaja.